"En su respuesta al discurso de Trump sobre el estado de la Unión, en representación del Partido Demócrata, el representante Joe Kennedy (de esos Kennedy, sí) pronunció unas breves palabras en español: “Ustedes son parte de nuestra historia. Vamos a luchar por ustedes y no nos vamos a alejar”. Hace unos días, Nancy Pelosi rompió un récord de la Cámara de Representantes al hablar durante más de ocho horas en las que contó historias de jóvenes inmigrantes indocumentados. Estos no son más que dos ejemplos que subrayan la importancia que da hoy el Partido Demócrata al problema de la inmigración, sobre todo en la medida en que afecta a su base, cada vez mayor, de votantes hispanos: el 64% de dicha minoría se identifica con los demócratas o al menos se inclina hacia ellos, mientras que solo el 24% lo hace hacia los republicanos. El número de hispanos en Estados Unidos era de 58 millones en 2016, alrededor del 18% de la población total." (leer en EsGlobal)