"Cualquiera que diga que no se sorprendió con los resultados de las elecciones de Estados Unidos en 2016 está mintiendo. Hasta el propio Obama se mostró confuso. En el momento, fue muy difícil explicar qué había pasado, pero ahora, más de tres meses después, tenemos muchos más datos para poder recomponer este puzzle electoral. Sí, hay que mirarlo como si fuera un puzzle, porque no hay ninguna fórmula mágica que explique que Trump se haya adueñado de la Casa Blanca: al contrario, es una mezcla de factores." (leer artículo en el Huffington Post)