“Tax and spend” (tasar y gastar) es la etiqueta preferida de los Republicanos para caracterizar las políticas fiscales de los Demócratas. Es uno de los grandes ejemplos del famoso “framing” que simplifica un argumento en un “soundbite” resonante. El partido Republicano cree religiosamente en los recortes de impuestos como casi la única forma de estimulo económico. Y, claro—nadie le gusta pagar impuestos, entonces, es una política popular y es muy difícil construir un argumento bonito para subirlos.
Pero, según Stan Greenberg (ver video abajo), uno de los encuestadores más respectado de Washington, un debate sobre impuestos favorece los Demócratas. ¿Cómo? Pues, ahora mismo estamos discutiendo el futuro de los recortes antiguos de Bush que van a caducar este mes. Lo que propone Obama es renovarlos para 98% de los americanos y dejarlos caducar para los 2% más ricos de la población para no cargar el déficit dando beneficios a gente que no los necesitan. Los Republicanos están amenazando un bloqueo de la legislación si no incluye los 2% mas ricos y aquí es donde tienen una oportunidad grande los Demócratas de decir que los Republicanos están dispuestos a hacer daño a 98% de la gente—la clase media—para ayudar los mas ricos.
De hecho, Greenberg indica que las encuestas suben 5% a favor al plan de los Demócratas cuando se enteran bien las dos opciones. Y la gente reacciona negativamente a la expresión de Reagan que explica esta teoría económica “trickle down economics.” La idea que ayudar a los ricos ayuda a todos porque la riqueza viene abajo gota a gota. Era la política de Bush y los votantes no son tantos: saben perfectamente que no funciona. Espero ver un buen debate en la semanas que viene.
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