Todos tenemos intereses y valores y casi siempre los compartimos con más gente. Cuando organizamos, lo hacemos normalmente porque los intereses que tenemos común están amenazados y hay algún tipo de enfrentamiento.

En la primavera de 2004 me animé a buscar otros ciudadanos americanos viviendo en el extranjero que apoyaran al partido Demócrata en las elecciones presidenciales. Encontré la página web de Democrats Abroad y descubrí que estaban organizados en España. Unas semanas después fui a una reunión donde nos unimos más de 80 ciudadanos Americanos en Madrid. Casi un centenar de personas con quien compartía muchos valores como no querer ir a una guerra preventiva o ilegal, como respetar derechos humanos y civiles, como colaborar con nuestros aliados, etc.. Estábamos molestos y ese enfado se convertía en un gran interés común: derrotar en el segundo mandato de George W. Bush.

Sin embargo, tener intereses en común no es suficiente. Hay que identificar los recursos que tenemos (en este caso el voto y dinero) en lo que queremos (victoria Democrática).

La mismo noche me animé a levantar la mano como voluntaria a ser la nueva presidenta de este grupo porque sabia que haría falta mucha mas gente para lograr nuestro objetivo de impulsar el voto desde España y sabiendo que había casi 100.000 Americanos en España había una oportunidad buena de encontrar unos cuantos votos democráticos.

Claro que esos votos solos no podrían ganar la elección—pero con mucha gente como yo organizando activistas en sus ciudades, pueblos y barrios (briznas de hierba) la suma seria un césped enorme.

Los organizadores con clave en este proceso porque son ellos que entablan la gente a decidir porque debería actuar para cambiar el mundo—sus valores y como pueden actuar para cambiarlo – su estrategia.

En mi caso, levante la mano porque tenía experiencia en organizar activistas para causas en California, sabia como hacer eso y además me sentí apasionada por la causa. Vi la gente aquella noche a mi alrededor y vi mucho potencial y que solamente hacia falta organización en enfoque.

Esta post forma parte de un serie sobre grassroots organizing que escribo cada martes.